El temblor del 85

Cuenta Marugenia Sámano Valenzuela, esposa de Gerardo Aguilar Tagle:

El primer temblor nos agarró en Tokio. Ni cuenta nos habíamos dado, pero Jerry Damage nos despertó: ¡Pa, Ma, la lámpara está moviéndose mucho! Prendí la tele. Vi a Lourdes Ramos y Juan Dosal pálidos del susto. Me asomé a la ventana y vi cómo se movía el edificio de enfrente, cómo se le reventaban las ventanas.

Me bañé de volada y me fui a trabajar al edificio de Crédito Mexicano, allá en San Ángel, junto a Plaza Inn. Cuando llegué, el edificio ya había sido desalojado; pero aún oscilaba, por sus pilotes hidráulicos.

El segundo temblor nos agarró rumbo a la casa. ya era tarde. En la televisión decían que había algunos incendios en la Colonia Juárez. Fue entonces cuando imaginamos nuestra casa en llamas, porque ni siquiera nos dejaron pasar: la zona estaba acordonada. Uuuuuuu. Puras ambulancias. Uauauauauauaua. Qué emoción. Uuuuuuuuu. ¡Al fin una película en vivo! Uuauauaua. ¿Te gusta, Jerry? Maru me regañó por convertir el evento en el Terremoto de 1974, con Charlton Heston y Ava Gardner.

-¡Qué mala película! Ni Walter Matthau se salva. ¿Sabes quién sale también, Mamor?
-¿Quién?
-Pedro Armendáriz Jr. ¡Pero qué mala película! Más mala que la carne de puerco. Prefiero Infierno en la Torre. ¿Sabes quién me siento ahorita?
-¿Quién?
-Steve McQueen.
-Tú eres más guapo. Ni Paul Newman es más guapo que tú, chiquito.
-Sí, yo sé.

N. de la R. En ese momento de exaltación irresponsable, ni enterado estaba de la desgracia de mi hermano José Luis. Él vivía entonces con Lidia, su mujer, y con Patricia, su primera hija (Elisa nacería un año y cuatro meses más tarde). El día del temblor perdieron su casa (la casa de Lidia). Mamá-Z se presentó por primera vez (si no contamos las dos ocasiones en que tocó para los amigos y la familia) una semana después del temblor, en la librería El Ágora.